
Cuando recibimos un encargo nos ponemos a trabajar en todos los aspectos que pueden influir en que la obra cumpla las expectativas de nuestro cliente. Elegimos el formato (papel o lienzo), los materiales que vamos a utilizar y, algo que es fundamental, los colores. Intentamos que se complemente con la decoración del espacio que va a decorar y que transmita algo determinado.
En este caso, nos pidieron este dibujo en un lienzo de 90 cm X 90 cm para presidir un salón. Nos lanzamos y apostamos por el dorado como color predominante. ¿Por qué? Porque cada color tiene un significado simbólico y este encajaba a la perfección con la personalidad de nuestra clienta.
ORO: Se asocial con el sol y la abundancia. Es un color que revitaliza la mente, la energía y aleja los miedos. Fortalece cuerpo y espíritu.
Un día hablaremos de la importancia del color en el lenguaje del arte y de lo que simbolizan en psicología.