Contar emociones es un oficio difícil. Pero hay personas que parece que han nacido para eso, para mostrar al mundo pedazos de realidad vista desde una perspectiva personal.
Y si el sello lo pone Fernando Valdecantos, mejor que mejor. Porque ve la vida como si fuera una película. Él, que es un enamorado del cine, y que hace casi quince años corrió a perseguir su sueño a Nueva York. Allí estudió cine, y allí un día cualquiera tropezó con una pequeña moneda: Un búffalo nickel. Un amuleto que todavía conserva, junto a su pasión por el séptimo arte, y que da nombre a este proyecto.
Ahora emplea todo lo aprendido para contar historias, pero sobre todo, para inmortalizar emociones.
Telmo 27-9-14 from Fernando Garcia-Valdecantos on Vimeo.
Si queréis conservar un recuerdo especial os recomiendo que os perdáis en su web.
+info: Buffalo nickel